Momentos enfrentados en los cuales no te conozco

  Momentos enfrentados en los cuales no te conozco. Amigos del alma en hiel pasajera. Una palabra de mas y dos escenarios rotos.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

El don de gente quedó aparcado.

  El don de gente quedó aparcado.¡Ya abrá tiempo!-me dije- Mas el tiempo que oro parece se me escapó de las manos.¡Abráse visto!

  M.Mercedes Rodríguez Perera

No dudé en engancharme a la sensibilidad del momento.

  No dudé en engancharme a la sensibilidad del momento, a su despertar, a sus secretos más íntimos. Aquéllos que no se cuentan mas se perciben de lejos. En el deambular de tu mirada encontré la templanza.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Y el despertar de la flor...

  Y el despertar de la flor, con su total descaro y atrevimiento.Envolviome en su perfume, en su ronroneo caprichoso, en su cabizbaja mirada y pensativa me dejó.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

¿Dónde nace la vida?

  En el momento en que agua y cielo se encuentran. Se divisan horizontes infinitos. Mas un mar inmenso, inquieto, en ocasiones despectivo, allí suelo encontrarme.

    M.Mercedes Rodríguez Perera

Que la vida me mira

  Que la vida me mira. Mas espejo no soy. Tantas formas de vida que en deuda quedo yo. Un abstracto infinito para en deuda quedar con vos.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Desconocidos

  Quizás presumas de conocerme, de anidar en mis adentros. De festejar sentimientos. De adormecer mi mirada. Lo de adormecer te creo puesto siento que mi vida perdida en un universo ha estado. ¡Ojalá despertemos a un tiempo para saber de tus andares, para conocerme a tiempo!

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Y a la vida le di paso...

  Y a la vida le di paso. Enseñándome a mirar. Casi pierdo los sentidos al quererla yo encontrar.

      M.Mercedes Rodríguez Perera

Lo abrupto de una mirada

  Lo abrupto de una mirada. Con esencia simple y manifiesta. El color del silencio... un abismo casi sin pausas.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

¡Oh, se me ha escapado la vida!

  ¡Oh, se me ha escapado la vida! Mas ella jugaba al escondite conmigo. Se escondió detrás de un reloj hasta yo aprender que siempre estaría en mí. ¡Oh, qué paz!

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Buscando la luz en la oscuridad

  Buscando la luz en la obscuridad. Torpes caminos al alba. Escurridizos monumentos de vida.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

¡Ay del dinero ilícito danzando a capricho!

¡Ay del dinero ilícito danzando a capricho! Siendo dueño y señor de sí mismo. Llave de una cárcel sin red. Insaciable hasta la médula. Hambriento y sediento a placer. Carente de sentimientos y emociones de todo tipo. Principalmente cuando se roba a cuerpo de rey.

    M.Mercedes Rodríguez Perera

Mariposas de paso

  Mariposas de paso. Volátil como el tiempo. Miradas infinita, difícilmente definida. Esencia de todo un mundo particular.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Flotando en el aire

  Flotando en el aire. Con sueños dulces. El momento de la contemplación reiterativa. Por momentos me agarro a la vida. Mas el viento huracanado de tu mirada aberrunta que nuestra relación está en la cuerda floja.

   M.Mercedes Rodríguez Perera

Esa verdad escurridiza

  Esa verdad escurridiza, necesaria, suspicaz. En ocasiones la libertad y sus andares nos encaminan. Un mundo un tanto caótico que busca un equilibrio fisico-emocional-síquico. Las tardes de invierno poco agradecidas. El don de la palabra, artilugio de lujo.

    M.Mercedes Rodríguez Perera

Un habitáculo semioscuro

  Un habitáculo semioscuro y un gran ventanal cerrado. Monotonía en vidas resignadas. Se abre el ventanal y surgen la ilusión, el bienestar, los proyectos. Al poco tiempo se cierra el ventanal y todo queda en una confusión, en un sutil olvido.

     M.Mercedes Rodríguez Perera

Una cuchara, un cuchillo y un tenedor

  Una cuchara, un cuchillo y un tenedor para saborear el mundo. Para cortar de lleno con los malos rollos. Para endulzar los momentos de felices encuentros. Para codearme con mis adentros.

     M.Mercedes Rodríguez Perera

Y la vida nos cambia

  Y la vida nos cambia. Por que las circunstancias pueden ser mutantes. Mas la adaptación es la muleta de toda una vida. Ver nos prisioneros de nosotros mismos marca nuestro estilo de vida. Al final me veo a mí misma reflejada en mi propio espejo. ¡Oh!...

      M.Mercedes Rodríguez Perera

Una bola de fuego

  Una bola de fuego en su mirada. En el traspiés de su alma. En la alegoría de sus pensaminetos. Un juego de ocas para atreverse a dar ciertos pasos. Mas en la constancia de la vida multitud de caminos a la espera. La espera de la ilusión, del sentimiento, de las emociones... mientras tanto agarro tu mirada y la envío a todo mi universo. ¡Oh!...

    M.Mercedes Rodríguez Perera

Los momentos vida

  Aquéllos momentos ingenuos en el tú a tú del tiempo. La nostalgia derramada a raudales casi sin ser vista. Una timidez avanzada que marcaba a pasoso cortos en la distancia. La añorada libertad conocida solo en la teoría. La libertad plena, extendida mas allá de todo un horizonte, se convertía en ocasiones en una gran desconocida. ¡Abráse visto!

    M.Mercedes Rodríguez Perera

Y la diversidad de un firmamento

  Y en la diversidad de un firmamento encuentro una naturaleza llena de esencias particulares que convergen en la vida. Momentos en los que yo respiro con calma, segura de mí misma. Y en la esencia de la vida entiendo la bondad de muchas personas, su carisma, su carácter, su don de gente. Mas allá, lejos del vacío interior,de aquello que sentido no tiene... conecto, casi por casualidad, con el mundo y ello me hace sentir muy bien. ¡Oh!...

      M.Mercedes Rodríguez Perera

Buscando una libertad interior

  Buscando una libertad interior. Divagando por el tiempo. Una búsqueda constante de un yo interior formalizado, ecuánime. La vida busca su encuentro. Busca la autenticidad de los momentos. Quizás también un mundo interior que, en ocasiones, la priva de su verdadera libertad. De su conexión favorecedora con un mundo exterior. Busca compartir, aprender, digerir vida, asumir vivencias, circusntancias particulares. Busca un encuentro, además de con ella misma, pues también con el mundo exterior pues sabe que ello la favorecerá bastante. Le ayudará a conseguir sus objetivos más básicos y hasta mas auténticos.

  M.Mercedes Rodríguez Perera

Las moradas de tu vida

  Las moradas de tu vida. De la esencia mas particular de tu propio ser. Un amigo que va y viene, que está a tu altura en cuanto a emociones, euforias a veces sin justificar. Que me acompaña en momentos de bajonas de escándalo. El amigo que es amigo, que pone sus normas y hasta stop nada caprichosos. Mas el alma de la esencia vida me  conquista, me hace sentir viva,sin un antes ni un después justificado yo, vuelvo a ti. La morada de la libertad en la cual me muevo y toreando miedos me abrazo a la estabilidad de mis sentimientos, a la verdad de mis argumentos y al despertar siento que algo en mí ha cambiado pero para bien. ¡Oh, bien venido!

     M.Mercedes Rodríguez Perera

Consultando al tiempo

  ¡Oh, pero que tiempo mas sinverguenza!Horarios que se estabilizan y en ocasiones me los salto a la torera. Magia en el alma humana con el proceder de tus antojos. Y la vida me conquista, premia mis deberes y me libera de acusaciones insensatas. ¡Pero qué me dices! Mas la libertad llena toda mi aura, incluso mi razón de ser. Pesadillas al vuelo. Aterrizando en terrenos pasajeros, mas ya no me importan. Me cautiva tu mirada y eso para mí es uno de los aterrizajes mas perfectos que conozco.

      M.Mercedes Rodríguez Perera

Volaba tan alto para agarrar la alegría

  Volaba tan alto para agarrar la alegría. Burletera ella cuando ganas le venían. Te robé sueños sin que tú fueses consciente de ello. Mas un sentimiento revoltoso casi me deja fuera de juego. ¡Abráse visto tanto descaro! Y los sentimientos nobles... coquetos y a la espera. Mas mi barca está desierta y yo, pues a la vera del camino. La esperanza es el sentimiento que jamás ha de marcharse a hurtadillas. Pues ella nos da de comer y sacia nuestro apetito.

      M.Mercedes Rodríguez Perera

¡Quién conoce el lenguaje del alma!

  Sí, del sentimeiento abrupto. Del inverosimil pasado que se derrite en el tiempo ante la mirada imaginaria de un mar en calma. De una máscara cautivadora de momentos. Y en la búsqueda me doy un respiro. Un descanso merecido. Mas la vida es para expresarla en plenitud, con la mayor extensión y atención vital. Por que en la sonrisa descubro tu luz, aunque, en ocasiones, creo que me pierdo a medias.¡Solo a medias! Y luego despierto ante tanto torbellino mental. Mas entiendo que mi creatividad, a veces, pues se pasa un poco de lista. Bueno, bueno, la perdonamos ya que su esencia es muy vital y gratificante. ¡Pues así sea!

     M.Mercedes Rodríguez Perera

Y en la distancia me encuentro...

  Y en la distancia me encuentro en un mundo distinto. Ajeno a mí misma. Mas sigo la ruta de la vida. Sí, la del vaivén de los momentos. Y en la distancia del tiempo los momentos se hacen presente, cercanos. Caudalosos recuerdos en un mar de lágrimas. En un arcoiris de colores danzando en el aire. Y la vida continúa, responde a mi necesidad de supervivencia. Vida que descubro a través de ti, de personas como tú. Que surcan el mundo con su creatividad dejando atrás todo un firmamento infinito. Y... cuando casi todo está perdido apareces tú, con una amplia sonrisa, con una mirada reconfortadora, y es entonces cuando yo, con una seguridad infinita, sigo en ruta.

     M.Mercedes Rodríguez Perera

Un universo que nos acompaña

  Un universo que nos acompaña. Que se hace grande e inmenso para abarcar respuestas y circunstancias de todo tipo. Un universo infantil que trabaja relaciones personales, humanitarias, de respeto, de buenas relaciones afectivas. ¡Oh, un globo para una sonrisa!Un niño grande que abarca muchos momentos de vida. También, en ocasiones, una absoluta soledad que yo borro con mi goma mágica que me regaló un gran mago. ¡Oh!...

   Mas la verdad puede ser difícil de digerir por que en ocasiones vienen acompañadas de multitud de tormentas. Mas las tormentas suelen ser pasajeras. La habilidad de adaptación alos distintos medios me invitan a entrar en el mundo de los sueños infinitos. Esos que yo fabrico a cuerpo de rey. Y en el despertar de la mañana me acuerdo de ti. De nuestros juegos, de nuestras idas y venidas, de los sueños proyectados que el infinito nos devolvía con grado sumo. ¡Oh, pero qué dices!

    Y es en la conquista donde yo aprendo el valor de los sentimientos, de la honestidad. Despertando a la vida y a tu a veces, inquietante mirada. ¡Caramba, qué está pasando!

       M.Mercedes Rodríguez Perera