Deudas con él yo no tengo. Mas se insinúa en su ronroneo. Conquista, su melodía, el alma de mi querer. No siempre calma mi vida. A veces, agrieta el ser. Momentos de tempestades, de calma y de sentir.El sabe que yo lo entiendo. Por eso estoy aquí. Su juego no es nada nuevo. Siempre lo he sentido en mí.
Deudas con él yo no tengo. Mas se insinúa en su ronroneo. Conquista, su melodía, el alma de mi querer. No siempre calma mi vida. A veces, agrieta el ser. Momentos de tempestades, de calma y de sentir.El sabe que yo lo entiendo. Por eso estoy aquí. Su juego no es nada nuevo. Siempre lo he sentido en mí.
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