Es una muñeca muy especial...
Tal vez singular y anhelada.
Calmó el dolor de muchas soledades inquietantes.
Confidente en mis días dulces y amargos.
Buscada con ansía y alegría...
Puede parecer una de tantas otras que tienes en tu haber.
Pero hasta le has puesto un nombre y ello la identifica como alguien particular, con un lugar, con un antes y un después. Compartiendo mil deberes y hasta obligaciones no entendidas, pero necesarias para el bien común, familiar...
Algo en ella la hace dulce. Tu le has hecho sentir muy especial. Ambas sois auténticas en vuestro mundo interior y algo privado.
Sabes que no te va a dar la espalda y una sonrisa tímida y a la vez alegre se esboza en tu cara... también compartes con ella tus alegrías. ¡Eso sí que es super guay!
¡Sí, la muñeca!
M.Mercedes Rodríguez Perera
Que te voy a contar yo de uno de los escasísimos regalos de reyes. Mi muñeca era mi amiga, mi confidente, mi forma de expresión. La verdad es que la quería hasta la saciedad. Solo tenía un vestido de muda... mas yo le comentaba que hay cosas en la vida que ni el dinero puede comprar en toda su andadura. Luego sonreía y creía conquistar al mundo.¡En fin, cosas mías y de mi muñeca!
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