_Una planta, fuente de vida... de luz, de bonitos y agradables sueños.
_Gratos momentos acompañados de una brisa suave, dulce, refrescante...
_Aquella cruz...
_Con su derecho y con su revés...
_Donde se adhiere la injusticia, las rupturas injustificadas, las agresiones que nunca han de justificarse, una enfermedad que no se sabes como encajar para seguir adelante. Sí,, con paso firme, con alegría interior-exterior...
_Luego viene el revés de la cruz...
Donde se nos invita a la colaboración, la luminosidad de tu mirada, el murmullo de algunas palabras bonitas, el divertido juego de los "peques", sentir que a pesar de la distancia siempre hay algo que te une a otras personas. Una sensacion donde la distancia no parece ser un problema, cuando la confianza está a flor de piel y los secretos pues... secretos son.
_Cambiar no siempre es fácil.A veces es sumamente imposible. No siempre se consigue mantener una relación, del tipo que sea, cuando los quilómetros parecen infinitos y las dudas...
_Pero la vida es una conquista. Una renovación de los votos de la libertad, de lo justo, de aquello que es autentico... si no crees en ello, pues dificilmente podrás estar ahí en la medida que se te necesita, o cuando en momentos difíciles, la espera pueda ser insufrible...
_Mas engánchate a los buenos momentos, disfruta de tu caminar en la vida, de tu despertar estes donde estes. Tu vida tiene muchísimo sentido. No es un pergamino. Es una forma de ser, de madurar, de actuar, de conquistar vida.Sí otros han podido, pues tú también puedes. A lo mejor no necesitas llegar al final de tu camino para ser feliz, para que tu vida rebose de ilusión, de momentos sorprendentes, inesperados... mas tu sola presencia seguro le da uno y mil sentidos.
No te marques metas excesivamente largas. El camino ha de ser siempre personal. En el fondo eres tú quien guíe tu camino. No importa si haces paradas muy largas. Lo importante es que te sientas bien, cómodo/a en el recorrido... lo demás vendrá solo. ¡Si quieres puedes cerrar los ojos! ¡Suerte!
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M.Mercedes Rodríguez Perera
Yo tengo una forma particular de ver la cruz. Es decir, no me quedo con los momentos tormentosos, angustiosos, de inseguridad, de dolor... la cruz necesita respirar ante tanto dolor y agonía. Yo le regalo a la cruz los momentos divertidos que surgen en mi vida, la naturaleza, la libertad bien entendida, amistad, compañerismo, respeto, sinceridad... tu puedes decir otras...
ResponderEliminarMe he sentido en multitud de momentos, principalmente en la infancia, que llevaba una cruz de madera la mar de pesada. El problema estaba en que no sabía como pedir ayuda. Tampoco entendía como deshacerme de dicha situación, como explicarlo adecuadamente si no había dios que me entendiese. Renuncié a mis derechos por que convencida estaba que no los tenía. Hoy puedo respirar... ello es un paso enorme para mí.
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