Se está acostumbrado, según mi entender, a pensar que si no trabajas y das el ciento por ciento en tu trabajo pues, según algunas personas, estás perdiendo el tiempo, estás siendo un gandúl. Se comenta, a veces, que no has de bajar la guardia, que la superación es necesaria aunque estés en un estado de total agotamiento y estrés brutal. Pero dicen que en el mundo, los mejores puestos en los trabajo, en los negocicos, en política... se consiguen a base de tesón, y una constancia en el trabajo que solo de pensarlo me quedo exhausta....
He conocido algunas personas que, cuando están de vacaciones, pues tienen la impresión de que son imprescindibles en sus trabajos, que con uno o dos días de vacaciones ya tienen para rehabilitarse de todos los meses trabajados. Miran el móvil o el ordenador como si de un instrumento vital pegado a su organismo se tratase. La palabra descanso, algunas personas, parece producirles picores e incomodidades... son esclavos del trabajo y no lo saben. El mero presentimiento de que puedan perder el trabajo les lleva a un estado de shock...
En fin, yo entiendo que el trabajo hay que cuidarlo. Mas entiendo que las vacaciones son para disfrutarlas, tener tiempo para tu familia, tus amigos, sentir que esa etapa te pertenece y nadie ha de precionarte para que tu rendimiento supere casi los límites de ti mismo/a.
La vida no tiene sentido si no te dedicas tiempo a ti mismo/a, a sentir emociones diferentes, a saber estar de otra manera.
Yo fui catequista durante muchos años, ya os lo he comunicado. Un día de catequesis, estabo yo próxima a un grupo de niños de catequesis, no todos de mi grupo. Ese día una niña de unos siete años se acercó a mí y me hizo una pregunta a cerca de dios que me dejó fuera de juego. Simplemente, la miré y no pude responder. Desde entonces yo escuchó muchísimo mas a los niños y entiendo que aprendo mucho de ellos. Aunque algunos comentarios suyos me dejan sin habla... mas una pregunta curiosa, la de aquella niña, fue todo un aprendizaje en mi actitud.
M.Mercedes Rodríguez Perera 31/03/14
La sociedad suele ejercer una predisposición al individuo, en general, de asumir obligaciones sin un fin específico.. Evidentemente, las obligaciones son necesarias para realizar las tareas en el trabajo con la responsabilidad y seriedad que, a veces, requieren. Hacer las cosas sin una finalidad, sin una dirección que nos guíe, pues suele ser deficitaria en sus objetivos. Mas tu tiempo te pertenece.... desconectar es difícil, sobre todo en ciertas profesiones. Entenderlo, pues suele ser aun mas incomprensible. ¡Mas así es la vida, llena de contrastes!
ResponderEliminar¡Cuántas cosas dejamos atrás por mirar solo en una dirección!¡Por sentirnos campeones en solitario!.Aprender de ti, consiste en autoevaluarte de vez en cuando. Te ayudará a superar momentos de dudas, de incomprensión... la vida es una conquista y en ella participamos todos. El tiempo libre es como un juguete. Tener la capacidad de valorarlo, de ilusionarnos, de sentir que es todo un regalo que alguien me hace... quizás por casualidad.
ResponderEliminar