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lunes, 24 de marzo de 2014

¿Qué le pido al viento?...


    Pues que se lleve las deudas pendientes que en ningún momento han debido formar parte de mi haber.
   Que traslade muy lejos de mi mente-vida aquellas situaciones con las que no quiero contar, bien por que me hacen daño, o quizás por que he madurado lo suficiente como para no tenerlas en cuenta.
    Que me cuente bonitas historias con las que navegar a puertos infinitos.
   Que la esperanza sea mi anillo de pedida y un as en momentos difíciles.
   Que el compartir se haga relidad. ¡Ojo!, teniendo muy en cuenta el significado del compartir y la intención con que se comparte y a quien se comparte.
     Le pido al viento que se lleve muy lejos de mí las tormentas negruzcas que han formado parte de mi vida. Que se vayan realmente lejos y nunca recuerden el camino de vuelta a mi casa. ¡Ojo, que tampoco quiero males ajenos para nadia! Aunque un poco de justicia mal no nos venía a nadie... a ver si el barco compensación, equilibrio fisico-emociona, compañerismos, ilusión por la vida... tenga un hueco en sus adentros para intentar disfrutar del verdadero sentido de la vida.
   Que su esencia mas delicada me acompañe en mi caminar, puesto que, me es muy grata su compañía.
Que aprenda de la vida y que... ningún huracan mal intencionado pueda romper la estructura en la que me muevo y que está construida con la disposición, la humildad, el orgullo, el respeto y el saber estar de muchas personas que sí han querido estar en mi deambular por la vida. Agradecerles a dichas personas que hayan sido super valiosas para mí. Que sin ellos/as, probablemente la luz no hubiera regresado a mi vida con tanta holgura y serenidad. Gracias infinitas a todo/as aquellas personas que se han hecho presente, y siguen presente en mi vida desde el alimento-vida, desde el compartir, el compañerismo, el amor y la ternura... mensaje todo ello de paz ante lo hambriento de una multitud que puede desconocer que provoca sus momentos mas oscuros, o su constante insatisfacción en su vida.
      Le pido al viento que a través de mi persona, de mi forma de comunicar al mundo mis inquietudes, pues algún día consiga volver a mí ese blog-vida que fue copiado sin ningún tipo de escrúpulos, ni autorización. Por el mero hecho de urgar y robar en lo ajeno. Con la intención de publicar un libro no autorizado con mis contenidos del blog-vida, destruyendo, supongo yo, lo intacto, propio, y seductor de mi trabajo. Sin tener en cuenta el dolor que produjo en mí algo tan propio, divertido, que me hacia sentir cómoda, alegre...en fin, a veces parece ser que el sujeto envidioso y celoso pueda no tener escrúpulos de ningún tipo, ni hartarse con necesidad ajena. 

     M.Mercedes Rodríguez Perera   23/03/14

1 comentario:

  1. Las llaves de una puerta, de una esencia vida... están donde menos te lo esperas. Un momento de comunicación en una situación de auténtica necesidad, pueda no tener llave... la puerta está abierta a la escucha, a la atención,a la ayuda... son la auténtica llave. ¡Tal vez no lo habías pensado! No olvides que las llaves a veces son imaginarias... cada uno tiene la suya. Importane ser equipo, sin aires de saberlo todo. La humildad es una llave maestra.. no importa que no la veas. siempre está ahí. gracias.

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