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martes, 8 de diciembre de 2015

De niña soñaba...


  De niña soñaba ser una persona super especial. Conocedora del mundo, de la gente. Persona que intereccionaba con todo tipo de personas. Ante todo una persona feliz, comunicativa y hasta divertida. Pero alguién rompió mi mundo interior. Lo tiró a la basura como si de algo inservible se tratara. Rompió mis sueños, mis bonitos y gratos amaneceres. Desde muy pequeña ya sabía lo que era el dolor. Un dolor fisico y un dolor sicológico. Se crearon con ciertas vivencias y muchos traumas. No sabía como salir de ahí.No sabía que podía existir la posibilidad de pedir ayuda. Varias personas cercanas a mí, rompieron mi mundo, mis expectativas de crecer y de ser mujer. Entendí que el sueño de ser madre solo era una utopía puesto que me veía incapacitada para acercarme a los hombres. Lo que para ciertas personas era pura diversión, pasar ratos agradables a costa del dolor y la humillación de otra persona. Pues para mí era caer empicada a un vacío muy oscuro. En la soledad mas acuciante. Sin respuestas ni salidas posibles en aquél momento. Me vi incapacitada para aprender, para avanzar en los estudios y en la vida. ¡Quién lo diría, la vida!. Luego reaccioné. Lo hice cuando aprendí a escuchar, a observar todo lo que giraba en torno mío. Aunque estaba destrozada fisica y animicamente me propuse luchar por mi persona. Trabajar mi compensación y demostrarle aquellas salvajes personas que no me habían hundido del todo. Que yo estaba dispuesta a tirar pa`lante y con muchísima fuerza. Era una persona muy orgullosa. En aquél momento el orgullo me vino como anillo al dedo. Tengo que decir con mucha admiración personal, que les debo mucho a los siquiatras y a todo el equipo de salud mental. Trabajé mi interior intentando sacar siempre un mensaje positivo. Aprendi a vivir en soledad. Así pues, la soledad no era una problema. La había trabajado para que fuese en lugar de mi enemiga, pues un refuerzo de superación. Entendí que castigar este tipo de agresiones era lo justo y lo necesario. Mas también entendí que no hay mayor castigo que ver los objetivos de los maltratadores pues a ras del suelo. No conseguirían salirse con sus primarios objetivos. Trabajaría mi relación afectiva conmigo mismo, con las persona que quiero, con aquellas personas que me han ayudado de forma incondiciona, e intentaría tener una relación afectiva con los hombres. Cosa que se me tenía prohibida, machacada y anulada. Uno de los objetivos de los maltratadores es que no puedas rehacer tu vida con otro nombre. Esta actitud, en general, se lleva muy mal por los maltratadores. No es fácil  todo ello. Mas en pocas palabras te comentaría que si te valoras, si sales a flote, si encuentras un sentido positivo y existencial a tu vida, pues tú habrás ganado la última partida. Razón por la cual yo he salido en ocasiones de mi anonimato. Ello me hace sentir fuerte, dispuesta a todo... la vida continúa y tú también eres vida, eres momento, eres ilusión, esperanza... La vida si es posible cuando las puertas mas importantes se nos abren y nos sentimos invitadas a dichos eventos. ¡Suerte!

      M.Mercedes Rodríguez Perera

1 comentario:

  1. Un niño/a es muy vulnerable.Sus sueños, sus ilusiones, sus momentos se pueden destruir en un abrir y cerrar de ojos. Mas hay niños en todo el mundo que son maltratados de formas bien diferentes. Ello suele quedar, en ocasiones, en un mutismo total. Mas las secuelas de esta actitud suelen ser terribles. Futuros truncados, momentos de desvalorización absoluta, vidas rotas sin un antes ni después que los justifique. A veces, se llega a tiempo. Quizás ello sea un triunfo para todos los que creemos en la reincersión del ser humano. Los que creemos en una vida con derechos, con deberes, con justicia...

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