La señora timidez

  ¡Oh!¡Oh!¡Oh!...

Sí, la señora timidez. Cuando se presenta, imaginativamente, parece no abandonar dicho lugar bajo ningun tipo de condiciones. La señora timidez suele ser muy incómoda. No es que, imaginativamente, vaya invitada a tu casa. Mas bien se invita ella solita.

    Ser una persona tímida es algo que puede resultar muy incómodo. Puedes tener la imperiosa necesidad de hacer mil mas una preguntas de un tema que has bordado casi a la perfección. Mas no abres la boca. A lo mejor no eres consciente que has creado en un interior una especie de bunquer que te atrapa una y mil veces. No se trata de buscar culpables por que, honestamente, no creo que los haya. Mas bien es una situación personal que no controlamos y se puede desbordar por momentos. La cárcel(la señora timidez) es tuya. Tu tienes la llave para entrar y salir de dicha situación. Claro que a ti no se te ocurriría tocar esa llave sin pedir permiso. Situación que agrava con creces el problema. Una mirada, una frase hecha, una expresión que consideras dañina en tu interior, pues puede hacer que tomes una especie de armazón para frenar todo tipo de circusntancias que te hagan daño. Mas no se trata de llevar un armazón. Mas bien afrontar las cosas. Puede que la situación no sea tan dfícil, tan complicada. Mas tú la haces un mundo. Y si es un mundo el mundo es tuyo. Eres tú quien ha de intentar salir de dicho mal rollo sin culpabilizar a nadie. Quedar atrapado en la señora timidez es bien fácil. Salir de ella es bien difícil. A no ser que te adueñes de la situación, aparques la timidez, y vayas a por todas. Dispuesto afrontar todo tipo de respuestas, de situaciones adversas... a veces, se consigue. ¡Por que el que algo quiere, pues algo le cuesta!

      M.Mercedes Rodríguez Perera