¡Los detalles que tiene una de mis sobrinas, de ocho años, conmigo, me desbordan!

Mi sobrina de ocho años, pues es super detallistas. Conmigo ha tenido algunos detalles que me han sorprendido. En parte, por que no esperas el detalle. Por otra parte, pues por que mi sobrina es tan creativa y original que me da mil apuros preguntarle que es, exactamente, lo que me ha regalado.

    Un día me regaló un reloj de pulsera tipo sol. Muy pero que muy infantil... Otro día me regaló unos zarcillos de madera. Para ella aquél reloj y aquellos zarcillos eran super especiales, ya que, a ella le gustaban muchísimo y decidió tener el detalle de regalármelos. Por supuestísimo que me comentó que me lo pusiera para alguna celebración especial. ¡Cara especial la que yo tenía que tener,  para ponerme aquél juego infantil de zarcillos de madera y reloj. ¡Ojo, para que no desentonaran! Bueno, el mayor regalo para mí fue su cara de alegría, de ilusión, su luminosidad y la seguridad de que aquellos regalos me iban a ir como anillo al dedo.

        Es la inocencia de los niños la que yo protejo con uñas y dientes, puesto que cuando se pierde la inocencia a una edad muy temprana, la vida de ese niño/a queda totalmente rota. Haciendo aguas por todas partes. Muchas veces no se es consciente de que a un niño/a alguien, algunas personas, les han roto lo mejor y mas bello de sí mismos. Sí, su inocencia... ese capullo que luego ya no crecerá adecuadamente, o quedará con secuelas muy severas a lo largo de su camino, historia personal.

     Pues volviendo con esta misma niña, un día me vino con un regalo super especial. Estaba dentro de una caja de muy alta calidad y con un lazo super mono y especial. Ella estaba muy contenta... incluso había hecho ir al padre al coche por que dicho tesoro se le había quedado en su interior. La madre de la niña no sabía que hacer para que no hiciera ningún comentario negativo a cerca del regalo. Y que no olvidara que se trataba de un detalle artesanal que la niña había tenido conmigo.¡Vaya con la niña!  Cuando abro la caja super guapa, pues me encuentro un trozo de pajilla con un hilo que atravesaba su interior y se anudaba en su exterior. ¡Ojo, que la madre se adelantó a decir a toda prisa que aquello era una pulsera super original  que lo había hecho para mí con muchísimo cariñó!¡Ojo, que la retahíla le salió super bien a la madre!. Evidentemente, le di las gracias a la niña con un fuerte abrazo y mil besos. Estas niñas tan detallistas me tienen todo el día con un clinex a lágrima viva.

            Hay niños/as que no son exigentes con el mundo, ni con la familia. Cualquier detalle que para nosotros no tiene sentido, pues para ellos es toda una satisfacción, una ilusión, una alegría que se les acepten... dicen que formamos nuestro carácter, nuestra personalidad, nuestro trabajar en equipo, nuestra sensibilidad desde muy pequeños... a estas pequeños/as grandes personas no les destruyas su mundo de entrega y generosidad hacia los demás. Puesto que, ello les hace super felices.  ¡Gracias!

             M.Mercedes Rodríguez Perera