Translate

martes, 20 de noviembre de 2012

Los años... el paso del tiempo.

Los años que se van... aquellos que no esperan. Los que se enfadan injustificadamente, los que dejan huellas en el cuerpo y en el alma.

La cruel dureza de una mirada, la sensibilidad de una voz suave, delicada, graciosa... enfurecida.
El juego de las palabras... y el calor cálido y dulzón del perdón verdadero. Aquel que se pone en marcha, que testifica verdades como templos, luces en la oscuridad de un alma un tanto tristona, quejica... a veces.
Aquella verdad que te mira y tú le correspondes. ¡Qué difícil es ser sinceros en nuestro tiempo! ¡Resulta casi prohibitivo llegar a un alma y tocar su puerta!
Multitud de basureros por que cuesta decir la verdad, por que nos sumergimos en pantanos llenos de residuos... por que muchas cosas quedaron a medias... por que todo no se dice... por que todo no se sabe. Muchas veces echamos a un super contenedor:
      Una verdad a medias.
      Una ruptura debido a malos entendidos.
      Una incomunicación que hiela el alma.
      Un adiós indefinido por no saber detener a esas personas que tanta vida te daban.
      El horror de una guerra sin sentido, sin objetivos, sin calma...

Aceptar a las personas es algo super difícil. Hemos de hacer exámenes de recuperación de forma periódica... el profesor no siempre está presente. Cada uno con su responsabilidad, con su cometido, con sus principios, con su ética... con su mirada perdida en todo un océano... con la luz de tu mirada.

    gracias.

M.Mercedes Rodríguez Perera

No hay comentarios:

Publicar un comentario