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lunes, 3 de junio de 2013

Buscando respuestas... comprando preguntas

A veces miro a un mar infinito. Suelo pensar en él ante momentos de dudas, de desiertos no diagnosticados. Me calma su balanceo. Me relaja su inmensidad. Bueno, digamos que yo de mares, pues como que no soy. Tampoco de tomar el sol por tiempo indefinido. Pero sí que me gusta pasear por la playa a la hora del atardecer.También por la noche... Tal vez no sean horas. Más quizás esté mas cerca de su inmensidad que en ningún otro momento. A veces juego con ella en el inicio incipiente de sus olas. Cuando está brava, yo como que ni mi nombre le digo. Pero reflexiono en su misma atmósfera. Yo sé que ella entiende de momentos suaves y tormentosos. Quizás me pregunte...

     _¿Nos hemos presentado alguna vez?
        -Entiendo que no se necesite ninguna presentación. Aunque tal vez... sea una intrusa.
       
      _¿Te has preguntado quien tiene la absoluta verdad?
          _Pues... nadie tiene la verdad absoluta. Mas todos tenemos nuestra parcela de verdad simplificada.
  
      _¿Piensas, tal vez, que el mar es poderoso?
          _Si lo es. Maneja mucha información en sus adentros. Además es capaz de calmar hasta el rugido mas feroz de una incomprensión humana.
       
   _¿Vives fabricando verdades?
      _Pues no, aunque tal vez mi vida se dirija a la búsqueda de algunas verdades, las cuales, inconscientemente; publico a los cuatro vientos.

   ¿Te ha servido de algo mi compañía?
          _Me has hecho preguntas que ignoraba. Me has cuestionado respuesta que jamás pensé tener ne mi poder. En mi mente abstracta.

Así pues, el camino lo hemos hecho juntos. No importa quién hizo la pregunta ni quien dio mas respuestas que el otro. Lo importante son los resultados. Sí a ti te ha sido productivo, pues a mi me ha resultado complaciente ayudarte. Quizás ambos necesitábamos respuestas y las preguntas fueron un tanto comprometidas a veces...

      Tal vez tengas razón... por eso te visitaré de vez en cuando. En la complejidad de una mente. En la satisfacción de unas respuestas.

        M.Mercedes Rodríguez Perera

2 comentarios:

  1. A veces intentamos entender nuestras cuestiones. Buscamos incluso mas allá del infinito. Se vende y se compra información como verdura en el mercado. Los demás pueden ayudar a encontrar respuestas. Mas no ignores tu capacidad para cuestionarte cosas y dar tu mismo respuestas a tu inquietud. Si la vaguedad te absorbe... una parte importante de ti muere... Quizás para no volver.

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  2. A veces vivir una vida no implica hacerse mil preguntas. Te sientes o puedes sentirte fuera de lugar. Mas no entiendes el por qué. Surgen preguntas, se mastican respuestas. ¡A quien preguntar!, ¿Por que surgen tantas preguntas, tantas inquietudes?. Intuyes que es tarde. Intuyes que la mente nos juega malas pasadas. Lagunas en tu mente, en tu vida y en tu ser. Mas sabes que no tendrán respuestas. Piensas que es importante calmar esa ansiedad y has de olvidar. Casi todo tiene su por que

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