EL CEMENTERIO...
-Cuando la verdad se entierra sin ningún tipo de responso.
-Cuando la libertad se ahoga en multitud de caminos maltrechos.
-Cuando un comentario bien intencionado puede crucificarte a cadena perpetua.
-Cuando a los marginados no se les permiten tener voz y voto. Aun tenido muchísimo que aportar.
-Cuando la ilusión se adjudica solo a los más pequeños.
-Cuando me resulta excesivamente difícil alzar el vuelo. Y soy incapaz de ver aquellas personas que quieren ayudarme, estar ahí en lo bueno y en lo dificultoso.
PERO EL CEMENTERIO...
-No ha de enterrar ideas con derecho a vuelo.
-No ha de marcar mi despertar a la vida, al juego, al cambio, a la solidaridad, al compromiso, al respeto...
-No ha de tener cabida en reuniones bien avenidas.
-No ha de estar en mí si yo hago lo posible por sembrar semillas de sensibilidad, de estabilidad, de sorpresa, de justicia, de crecimiento en libertad bien entendida y bien encauzada, de aprendizaje.
La vida es un mundo de altos y bajos. El equilibrio no ha de ser un punto de mira fijo y obsesivo... simplemente vivir, aprender a vivir, a ser feliz, a relacionarse correctamente, nos puede llevar a un equilibrio no- obsesivo, que no tenga aires de superioridad, ni de todo terreno.
El equilibrio establecido no siempre gana todas las partidas... no siempre sale victorioso ante los grandes retos... yo creo que el lo sabe.
M.Mercedes Rodríguez Perera
El cementerio puede ser muy triste. Mas si crees en la fuerza,en el potencial de la persona ya fallecida, mas que, en su momento sembró en ti la heredad de sus conocimientos, su sabiduría, su grandeza espiritual... llegas a la conclusión de que la vida del todo no se va. Y el tesoro emocional, afectivo que guardas puede no tener precio. Gracias.
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