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miércoles, 31 de octubre de 2012

Un dios particular en busca y acogida

Un dios que entiende mil más un idiomas. Principalmente, el idioma del sentimiento, de una libertad con derechos, del respeto, de lo auténtico, encontrado muchas veces en la más absoluta pobreza, en un desierto interior.

   ¡Mi dios particular es un poco atrevido!...

Ha querido ser partícipe de una balanza-equilibrio donde se medía la vida en su máximo esplendor.
Digamos que dios se ha visto un tanto cogido puesto que...

    -Bueno... lo que se dice vida en esplendor, que te libera de prejuicios, que te hace mirar a los otros-as tal y como son, sin ningún tipo de caretas ni amuletos para ser escuchados, puesto que no ha salido a relucir por ninguna parte.

    -En fin, que parece ser que casi se rompe la balanza-equilibrio y eso que, mi amigo dios, puso muy pero que mucho empeño para que la cara más autentica en el dar, recibir, compartir, transmitir... pudiera ser vista.

Mi dios particular estaba un tanto triston, parece ser..
que ha perdido una batalla super importante en su vida, casi en un abrir y cerrar de ojos.

    -Me ha mirado como si yo le hubiese fallado. Una mano más poco podía hacer por defender al ser humano desde su necesidad de justicia, de defensa personal. Claro que demás no hubiera estado echarle una mano.

Luego se le ocurrió hacer unas cuantas pancartas.Esta vez buscando voluntarios capaces de comprometerse en campañas un tanto difíciles. Bueno, muy pocas personas se apuntaron, aun sin conocer del todo el desarrollo del proyecto. Nunca le había visto con tanta luminosidad en su cara y tanto brillo en sus ojos.

    -Estaba super contento- por algo se empieza- me dijo con total agrado y entusiasmo.

Me comentó que él no era un super dios todopoderoso. Que todos somos parte de un equipo. Que la vida es un don que se transmite de unos a otros. Que no todo lo que se dice de él es realmente cierto. Según él, mucha gente se dirige hacia él exigiendo todo tipo de respuestas. Según dios, muchas de esas respuestas están en nuestro interior, incluso en la relación  con otras personas.

Dios es ante todo sacar partido a tus talentos, ponerte en marcha, sentir que tienes vida interior, que tu actitud crece y te hace ser mejor persona.

Aunque nunca hayas creído en él, tal vez sientas que algo o alguien ha cambiado tu vida, tu respuesta ante muchas necesidades.

    -No importa si tu no crees en él. Probablemente él crea en ti y apueste por tu persona en muchísimos momentos. Aunque no seas consciente de ello. Por supuesto, respetando tu libertad de elección.

       M.Mercedes Rodríguez Perera

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