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martes, 3 de septiembre de 2013

Y mi dios jugando a la pelota...


   ¡Oh, ahí anda mi dios jugando a la pelota!
     Parece ser que se ha presentado a un casting y ha sido uno de tantos seleccionados.
  Dicen que práctica mucho, pues le encanta el fútbol. ¡Ojo! qué bien calladito se lo tenía.
  Realiza algunas jugadas espectaculares. Mas nunca se brinda la jugada, exclusivamente, así mismo.
  Aprende de la vida, del mundo, de otros jugadores, de si mismo... de la suerte de haber entrado en un equipo. Proyectar su maestría y ser compañero de los miembros de su equipo es para él toda una satisfacción. Sin que el éxito obstaculice su mente, su persona, su esencia más vital.
Es en su sencillez, humildad como persona, su saber estar, sus aptitudes, su no perder el norte por mucho tiempo, donde suele sentar las bases de su éxito.
No sé si yo fui consciente, alguna vez, de lo importante de su vocación, de lo mucho que se había preparado para estar donde ahora se encuentra...
La victoria, según él, es un trabajo de equipo, un trabajo en funciones. Sí su equipo no estuviera ahí, él probablemente no sería tan luciente en sus jugadas. Por lo que nunca deja de mirar al equipo como equipo. 
        ¡A veces me brinda algunas jugadas!
   Mas yo, tímidamente, no sé para donde mirar. Aunque le devuelvo todo mi apoyo y gratitud.

        M.Mercedes Rodríguez Perera 

3 comentarios:

  1. La idea que tengo de dios no es convencional. Mas hubieron ciertas personas que me ayudaron a visualizar, a sentir, a orientar el dios con el que yo me comunico. Un día lo metí en mi mochila particular y a día de hoy seguimos haciendo senderismo juntos. Para mí ha sido muy feliz entender a dios de la forma que lo hago. Llena muchísimo mi vida. Compartirlo es todo un placer.

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  2. Un dios coqueto, con el que juego. Un dios juerguista, con el que paso ratos super agradables. Un dios creativo con el que me identifico. Un dios compañero, pienso que siempre estaremos juntos. Un dios que gusta de hacer dinámicas y compartirlos con todo un universo. Un dios que llora, quizás no le hallan salido las cosas bien. Un dios que defiende la naturaleza,se alimenta de su esencia mas particular... tengo suerte de haberte conocido. Me gusta el dios en el cual creo. Más sé que necesito de otros/as...

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  3. Me gusta hablar de dios tal y como lo hago. Haciéndole partícipe de mis historias. Implicando le a veces mas de la cuenta. Poniéndole en mas de una situación comprometida. Confiando en su fuerza interior, en su dolor, alma y lágrimas. Unas veces yo le doy la mano. Otras veces... me la da él a mí. Bueno, es que yo tengo algo de especial, algo de rarita...

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