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miércoles, 14 de agosto de 2013

¡Oh, una pulsera!...


   _¡Oh, una pulsera!...
        _Con ella encantaré a las mariposas!
     _Deslumbraré al señor arco iris.
   _Se moverá al son de mi danza.
_Sus colores despertarán en mí el ansia de la sorpresa, de la seducción, del despertar caprichoso.
     _Viajará conmigo a cualquier lugar del mundo. Sí, haciéndome sentir parte de su esencia, incluso de la mía propia.
   _Aquella pulsera que yo hice tan especial, y... un día la perdía, y casi se me va el alma con ella.
-Tener la sensación de que te acompaña, de que es especial...¡Ah, y yo pienso que ella lo sabe!

       Bueno, tal vez pueda parecer una super- exageración el valor que yo pueda da a ciertos objetos, algunos recuerdos, algunas fotos... en fin, a veces necesitas tener tu espacio propio, crear tu mundo particular.Algo que realmente sea tuyo, te pertenezca. Es verdad que la valoración hacia cosas que he tenido (algunas las sigo teniendo) pues ha sido bastante grande. No sé... supongo que será una forma de suplantar ciertas carencias.

     Dicen que nos movemos en el mundo de la necesidad... y ante tal panorama, pues se puede hacer imprescindible, el hecho de que cada uno se prepare su propio plato...

       M.Mercedes Rodríguez Perera

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