Siempre nos hemos de presentar como merecedores de alguna copa.
-¿Por qué?...
-Porque somos diferentes.
-Porque de alguna manera todos estamos en el mismo camino-vida. Independientemente de la ideología, de la nacionalidad, raza, clase social...
-Porque mi trabajo y el tuyo también son importantes.
-Porque la señora libertad me ha dicho que nadie es mejor ni peor que nadie.
-Ser diferentes, lejos de distanciarnos, nos ha de complementar.
-La vida nos pone algunas pruebas que, tal vez nos puedan parecer excesivamente difíciles de superar. ¡Ojo! si miras a tu alrededor, a tu entorno más cercano, quizás seas consciente que la soledad absoluta difícilmente ha tocado en la puerta de tu casa.
¡Quizás ello sea toda una bendición para los tiempos que corren y los tiempos que hemos de torear todavía!
¡Felicitate de vez en cuando, seguro tienes motivos para ello!
Que la suerte sea uno de los amuletos mas cercanos a tu persona. Sería muy bonito que aprendiéramos a compartir. Quizás ahí resida la respuesta a esos cabos sueltos que no terminan de encajar en nuestro puzzle tan particular.
M.Mercedes Rodríguez Perera
Voy a regalarle una copa a la vida, a la ilusión por vivir, al despertar en el esfuerzo cotidiano, al juego caprichoso en toda libertad, a la solidaridad con los necesitados, a la justicia bien entendida y bien administrada, a la educación y a los educadores entendidos en tal materia. Por supuesto, a tu sonrisa, a tu presencia, a tu persona, a los logros que sé has conseguido.
ResponderEliminarUna copa ganada con esfuerzo, tal vez sudor y lágrimas. Una copa que llenamos de agua para regar al mundo de cordura, de escucha, de libertad bien entendida, de capacidad para mirar el mundo y cambiarlo entre todos para mejor. Que tus hijos puedan respirar un aire mas puro. Que las personas ansiadas de paz interior,consigan ver en tu mirar, y en muchas miradas, pues que la paz es posible y el amor cura muchísimas heridas.Si, tal vez.
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