Lanzar una moneda al aire con la intención de recuperar un tiempo feliz. Quizás fuese un tiempo lejano compartido con personas que ya no están entre nosotros. Pero cuya constancia en el camino, su confianza en mi persona... Su capacidad para sorprenderme cada amanecer... pues llenaron mi vida de mucha luz. Sí, a pesar de las tormentas que juntos tuvimos que pasar para superar nuestra confianza, nuestros derechos a la superación en todo aquello que nos propusíeramos. Le canté una canción a la vida. Canción motivada por mis inmensas ganas de vivir. Aunque los desahucios formaran parte de un pasado cruel pero auténtico. Me propuse mirar al frente, aunque no fuera un militar en ruta. Quería desarrollar, recuperar todos mis derechos y para ello se hizo necesario sacar lo mejor de mí. Explotar y explorar mis talentos y darlos a conocer a todo un universo si ello les fuera de su agrado. Tiré una moneda al aire y le di gracias a la vida. Un gracias infinito puesto que mis objetivos, mis propósitos estaban en marcha. Sonreí a la vida e intuí que ella y yo teníamos muchas cosas en común. Un testamento vida para avivar nuestras sonrisas, nuestros proyectos vida, nuestras ganas de volver a conquistar el mundo. Me propuse que nunca mas volvería a estar sola por que casi sin ser consciente de ello muchas personas habían entrado en mi terreno particular, personal... lejos de despedirlos sin ningún tipo de consideración les di las gracias entre sollozos. Algo bonito había ocurrido en mi vida y no podía, de momento, descifrarlo, reconocerlo. Volvía a mirar nuevamente una moneda que acababa de tirar al aire y le di un gracias infinitas... algo ocurrió en mi persona que me llenó de mucha luz. Desde entonces he vuelto a creer en la magia que envuelve toda una atmósfera. En la magia de tu mirada. En la magia de un antes y un después. Sentí que mi organismo se activaba, despertaba de un ensueño casi infinito. Ahora me agarraré fuertemente a la vida. Mas nunca mas lo volveré hacer sola. La moneda estaba en mis manos, mas tenía un origen y un sentido universal. Mil gracias por estar ahí.
M.Mercedes Rodríguez Perera
Una moneda al aire para que nuestros sueños se materialicen. Una moneda al aire para nunca olvidar las personas que me echaron una mano en momentos de auténtica necesidad. Una moneda al aire para reconocer a las buenas personas, personas que saben llegar a otras personas desde la sencillez, desde la humildad, desde el respeto, desde la autenticidad. Una moneda al aire para que mi persona despierte de tanta ensoñación y se agarre fuertemente a la vida, Gracias a la vida, al equipo vida por que el despertar no ha sido nada fácil. Mas quizás todos estamos en una misma ruta con difurcaciones diferentes. Gracias a la vida que ha sabido caminar junto a mí y guiarme adecuadamente. Mil gracias a todos los que habéis querido estar ahí, junto a mí a la vera del camino.
ResponderEliminar¡Una moneda al aire para recuperarte! Una moneda al aire para que lluevan globos de multitud de colores y fantasear con todo un universo, en ocasiones agradecido. Una moneda al aire para que haya justicia en el mundo, para que todo el mundo tenga acceso a una defensa personal, donde sus derechos sean reconocidos. Una moneda al aire por la paz del mundo, por el compartir, por la ilusión en los niños, en los jóvenes, en los adultos. Una moneda al aire... sí, pero que no me queme mucho en mis manos por que cojo y la suelto.
ResponderEliminar