Translate

martes, 9 de julio de 2013

¡Y quién dijo no!


      Muchas veces puede ocurrir que nos sintamos inquietos. Inquietud a la hora de ejercer una determinada profesión... pero... hay alguien que te comenta: "eso no es para ti". "deberías esperar un poco más, seguro que no has madurado la decisión". "Tienes toda una vida por delante para decidirte"."Deberías  dejarte de tantas pamplinas y pensar que la profesión de tu tatarabuelo, abuelo, padre... esta hecha para que sigas sus pasos. ¡Pero que orgullosos se sentirían de que tu sigas la saga de...! Solo aquellas personas que verdaderamente nos conocen, nos corresponden, han estado ahí en momentos difíciles... te dirán que la decisión es tuya. Te juegas tu felicidad y no la felicidad de tantos y tantos descendientes que cayeron por vocación o por impulso no deseado a ejercer una profesión igualitaria para todos ellos. Muchas veces no somos del todo consciente para que estamos preparados. O que actitud nos hará felices, nos permitirá realizarnos con plenitud de derechos y satisfacciones. Sin ser conscientes de ello... continuamente estamos manifestando, dando a entender, de alguna u otra manera, aquello que nos apasiona, que nos hace sentir como pez en el agua... somos un libro abierto que, por intereses propios o ajenas, no se nos permite abrir. Casi como que hemos desviado el camino, como que nos hemos  defraudado a nosotros/as mismos/as. Mas yo comento: ¡Quien está desilusionando a quien! ¡Quien esta convirtiendo nuestras vidas en un montón de rutina sin casi fundamento...! 

     A veces podemos lograr escapar de un avasallamiento al que podamos estar siendo sometidos. Mas es verdad que si algo nos gusta, hay muchísimos momentos en lo que lo manifestamos con nuestro cuerpo, nuestra esencia mas vital, con la forma en que dicha tarea ocupa nuestro tiempo sin casi mostrar señales de cansancio.

    Si te equivocas... sé tú quien se equivoque. No te sientas culpable por no ser uno mas de la cadena interminable de profesionales de una misma rama por que es lo que toca(Oye, que también te puede gustar la profesión de tus antepasados). Esa también es una opción muy respetable. En definitiva, sé tu mismo/a. La vida nos suele dar muchas pistas de aquellos caminos que nos realizarán como personas felices, amenas, divertidas, agradables. No culpabilices a nadie de una decisión que has tomado,o deberías tomar, por voz y voto propio.

         M.Mercedes Rodríguez Perera

No hay comentarios:

Publicar un comentario