Hay personas que piensan que el destino rige los caminos de las personas. Mas a mí esa expresión me deja un tanto ahogadita. Yo creo en la libertad. Sí, aunque me suela mover, casi siempre, en los mismos ambientes. Sobre todo creo en la libertad interior, aquella que se trabaja, y su información sale casi por todos los poros de la piel. También veo la libertad en el juego de unos niños pequeños. Intentando aprender muchas cosas. Intentando no dejar escapar detalle de todo lo que les es interesante. Yo no siempre he amado la vida. Pero si que es verdad que desde hace muchos años yo he aprendido a conquistar la vida, a conocerla, a entenderla... aunque ella siempre me sorprende. Mas aun así, la libertad me hace sentir paloma al vuelo. Halcón universal, incluso, niño/a recién nacido. La vida nos soprende, de ahí que, a veces, nosotros/as tengamos que participar en su juego, en sus momentos multicolores. Es importante no plantearse mucho lo que se debe hacer en distintas situaciones que nos sorprenden siendo caminantes de camino. Simplemente al actuar ya estamos participando en el colectivo-vida.
Hasta hace poco tiempo yo era puro cansancio. Mis caminatas se habían reducido bastante. Incluso salir a la calle era todo un atrevimiento por mi parte. No había forma de encontrar el origen de tan brutal casancio. Y eso que me meti en el campo de salud, mas parecía no tener causas médicas que lo justificaran. Incluso ya estaba haciendo planes para, prácticamente, no salir de casa. Tenía que tomar alimentos por que sino a ver quién da un paso mas "pa lante". Hice todo lo que pude para restablecerme... pero todo parecía poco. Cada día que pasaba el cansancio era mayor. Tenía que hacer muchos parones en casa para intentar ponerme al día...
....Mas yo no suelo, últimamente dar las batallas por perdidas. Intento superarme, salir a flote, sonreír, dejarme llevar, mas siempre por el camino que consideres el adecuado. No me vayas a llevar por un pantano y decir que aquel camino es realmente el más idóneo. Estaba yo para idenoidades en el camino...
Pero un día empecé a respirar mejor. A realizar trayectos mas largos. A relalizar las tareas de casa con una mayor rapidez. Pensé que lo que me acababa de ocurrir era un regalo precioso. No esperaba, a estas alturas de mi vida, absolutamente nada. Y soy capaz de sentir el oxigeno navegando por todo mi cuerpo. Siento calma en mi vida. Siento tantas cosas que... no quiero bordar un mar de lágrimas. Simplemente, gracias. No podía dar crédito para verificar lo que pasaba en mi persona. Así pues... la esperanza, el trabajo personal, todo un atrevimiento en el camino, y no mirar las trabas que podamos encontrar... simplemente camina, investiga, analiza, aprende a dar las gracias.... diviértete.
M.Mercedes Rodríguez Perera 2/05/14
Muchas veces nos ponemos trabas a la hora de hacer las cosas. Estas trabas sí que son verdaderos hándicap en el camino. Sé positivo, aunque te caiga un chaparrón muy fuerte. Seguro que después serás uno de los primeros en ver un paisaje espectacular.
ResponderEliminarEl camino se hace andando. Pasito a pasito o marathón a marathón. Siempre que damos un paso hacia delante, pues es toda una posibilidad de alcanzar nuestros objetivos. Una batalla no empezada pues... un trinfo que no vas a disfrutar. A veces cuesta "tirar pa lante". Mas el resultado suele merecer la pena. ¡Ánimo!
ResponderEliminarA veces, en toda trayectoria. hay un lenguale subliminal que cuesta entender. Bien por timidez, por desonocimiento de las cosas... Mas dicho lenguaje subliminal existe y no siempre se necesita un procesador último modelo para descifrarlo. ¡inténtalo! A veces, dicho lenguaje subliminal se encuentra en todo un conjunto de vocales.
ResponderEliminarYo no estoy acostumbrada a que me ayuden. Me he llevado una de tortazos en la vida como para yo poner la mano. Mas es verdad, que de un tiempo a esta parte, la vida me ha conquistado. Todo recorrido, pues tiene su premio. Sí, aunque te cueste reconocerlo. Un trabajo bien hecho... un producto bien conseguido.
ResponderEliminar