Dicen que la búsqueda es encuentro.
Que anida en nuestro interior, y se proyecta en un mar infinito. ¡Oh!...
¡Cuántas veces el mar me ha hecho dudar!
Mas las tranquilas playas de arena disiparon todas mis dudas de forma casi caprichosa.
Sí, en una búsqueda constante, mas sin prisas puesto que mi yo interior desconocía que era lo que buscaba. ¡Oh, mal rollito!
Y la esperanza cautió cual pancarta encantada mi corazón en cautivario.
Me despedí de la noche. Sí, con una paz infinita, con el interés justo y necesario del que intenta hacer bien las cosas.
Mas los colores de mi abanico también quisieron manifestarse.
¡Caramba, cuánta discreción!
¡Faltaría mas!
Gracias
M.Mercedes Rodríguez Perera
¡Quién no ha buscado alguna vez una respuesta a los ronroneos de un alma, de un sentimiento, de un saber estar!... Y la vida algo traviesa parece dormirse en lagunas infinitas. Mas un saber estar puede abrir las puertas de toda duda, e incluso de muchas indiscreciones. Y la esperanza, señora muy disciplinada, no suele perder la compostura puesto que, sabe que con dicha actitud todo o casi todo es posible.
ResponderEliminarTe has preguntado alguna vez lo importante que pueda llegar a ser estar en una actitud no obsesiva de búsqueda. Puedes buscar, quizás, que tu deseo mas caprichoso se cumpla. Puedes buscar ser entendido por mucha gente. Puedes buscar que se te reconozca tu trabajo abiertamente... Puedes buscar tantas y tantas cosas. Aunque, quizás a veces olvidamos que, muchas respuestas a dicha búsqueda están en ti. En aquellos tus momentos que a veces, pasan desapercibidos hasta para ti mismo.
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