Solo los momentos agudizan un alma inquieta, la transforman... hasta su textura es diferente cuando la relación conmigo mismo, con mi yo interior es buena. La luz de mi vida empieza conmigo mismo, con mi persona en su conjunto. Pero para ver dicha luz, se precisa, en ocasiones, una actitud de echar pa´lante. Sí, sin mirar demasiado para atrás. Muchas situaciones han de quedar aparcadas.¡Ojo, solo por un tiempo! Sí, hasta que el temporal empieza a ser mas calmoso, a relajarse un poquito. Tras un examen de conciencia personal, de mis gratos e ingratos momentos, pues yo llego a la conclusión de que soy buena persona. No necesito barajar las cartas para que nadie me muestre mi futuro.Mi futuro es el camino que yo emprendo en mi vida, en la resolución de problemas, en mis aciertos y hasta en mis errores. Cuando el examen personal, del entorno, pues es auténtico, de tú a tú, seguro que intuyes, positivamente, que no lo has hecho del todo mal.
¡Y que a bailar con otros los malos rollos!
¡Porque ya este guiso lo conoces bien y también sus posibles ingredientes! ¡Suerte!
Conquista la vida... mas si la vida te conquista a ti, pues por algo será!
Bajar la guardia no significa perder muchas batallas. Mas bien pueda significar que, en una actitud cómoda, de relajación... las cosas se ven mejor. Sí, quizás desde otra óptica, perspectiva.
Sabes, un examen personal, a consciencia de nuestro debe y de nuestro haber, puede aclarar multitud de dudas. ¡Mas una mente clara puede hacer verdaderas maravillas!
M.Mercedes Rodríguez Perera
Momentos para aprender, para olvidar, para sentir, para emocionarnos... momentos para que no nos intenten manipular,mostrar caminos que no hemos elegido. Momentos para evaluarnos y conscientemente, obtener una nota bastante alta. Por que cuando alguien quiere enredarte puede llegar hasta un mas menos infinito. Mas una evaluación personal es capaz de disipar multitud de dudas. Sé tú el dueño de tu vida, de tus momentos, de tus equivocaciones... mas no te castigues demasiado. ¡Seguro que no has hecho nada mal la evaluación personal de tus momentos!¡Suerte!
ResponderEliminarHay momentos para la interiorización personal, para el compartir. Mas también hay momentos de relajación, de desconexión con aquello que pueda agobiarnos. Busca tu momento. Mas un momento no compartido puede llegar a ser un momento que cojea en cuanto a libertad en su máxima expresión. Momentos en los que olvidas multitud de situaciones un tanto incómodas, por que te adentras en el mundo de los amigos, de los colegas, en sus gracias, en sus subidones, y hasta en sus segundas intenciones. ¡Oh, no me digas!
ResponderEliminarQuizás sean algunos momentos los que cambian la templanza de tu persona, de tu ser, de tu sentir en la vida. Solo los momentos son capaces de hacernos creer que la felicidad existe, que puede ser materializada en un abrir y cerrar de ojos. Solo los momentos me haran titubear entre abrir la puerta o cerrarla por momentos. Solo los momentos entusiastan un mundo, una mirada y hasta una razón de ser. Por eso yo digo: ¡Benditos momentos los que me hacen soñar, reír, jugar, olvidar, compartir y consentir...!
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