Se abre una puerta a la solidaridad, al reencuentro bien avenido, a la escucha, al compromiso solidario, a las relaciones bien entendidas, a los momentos conmovedores que alimentan nuestro espíritu de agradables sensaciones. Mas hay momentos en que la puerta parece cerrarse ante la injusticia, ante el rechazo del otro por, quizás, puro egoísmo, por capricho que puede abarcar todo un sin sentido.
Momento en que la puerta se abre por que nos conocemos, decidimos darnos nuevas oportunidades para entender al otro, para entablar una relación sin prejuicios, de tú a tú, viviendo el momento presente, disfrutando de los gratos sabores del amanecer. Apostando por la vida, por las amistades de verdad, por el compromiso auténtico, por los momentos de necesario apoyo, compañía...
Mas a veces la puerta se puede cerrar definitivamente, es entonces cuando se ha de soltar amarras y partir mar abierto. Por que en ocasiones la distancia abre los ojos de la mente, y del corazón. Despeja las dudas, solidariza las situaciones que, verdaderamente, nos afectan. Se ha de partir sin remordimientos, sin malos rollos, sin prejuicios adquiridos. Es entonces, ante la distancia cuando la situación se vuelve mas clara, mas transparente... se aprecian las cosas con mayor objetividad, y puede ocurrir que, ante una mente compensada se compensan las situaciones que nos agradan, que necesitamos aclarar.
Porque la ignorancia suele cerrar muchas puertas y abrir, quizás, miles de lagunas en el alma de todo ser humano.
¡Quizás las cosas se arreglan cuando olvidamos tantas y tantas situaciones superflúas!
¡Apostemos por la vida, por la ilusion en cada amanecer, por el despertar que a veces, ingenuamente, me transmite tu mirada!
En ocasiones, la espontáneidad es capaz de llenar la totalidad de un alma de gratos momentos.
¡Ojo, sin asfixiarla, faltaría mas!
M.Mercedes Rodríguez Perera
A veces, ahogamos los momentos que mas nos importan, sin ser conscientes de ello, por que tratamos de forzar los caminos. No somos conscientes que los caminos, los cruces de trayectorias se pueden encontrar en infinidad de momentos. Y esto, la persona acostumbrada a los caminos, pues bien lo sabe. Un encuentro con naturalidad, espontáneo, grato... puede surgir en cualquier situación. ¡Claro que, para ello es muy importante, olvidar prejuicios! A lo mejor has encontrado a las personas que mas quieres en los lugares menos esperados. Quizás no le has dado importancia a la naturalidad y comodidad del momento... los caminos son imprevisibles, mas tú has de ser tu propio monitor en dichos caminos. ¡Las oportunidades son oro... y el oro es camino!
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