Un día me desperté y me dije:¿Se puede cambir el mundo? ¿Y si el mundo me cambiase a mí?. Bueno, no importa, el mundo conoce tu forma de ser, de sentir, de pensar, de comunicarte, de aprender, de amar... El mundo forma parte de todos y cada uno de nosotros. Es un regalo que viene junto a la vida. Pues yo, invitaría a los jóvenes a reunirse, a compartir aficiones, momentos gratos, de interés, de euforia a escuchar... Le preguntaría a los jóvenes si se han sentido vivos muchas veces. Que ojo, ello es muy distinto al hecho de estar vivo. Les echaría una punta con la intención de compartir con otras generaciones sus experiencicas y que exploraran, con educación, el mundo vivido por esas otras generaciones. Luego... cerraríamos todos los ojos y pensaríamos en un bello amanecer y un regalo muy particular, artesano, hecho por nosotros/as mismos, llevando incorporada una frase bonita, atenta,quizás espontánea. Luego, invitaría a los allí presentes que imaginaran un bonito anochecer con todo lo de sujestivo pueda tener un anochecer... y a la mañana siguiente yo miraría a todo un infinito con la intención que en algún lugar del mundo habría jóvenes donde este estilo de vida fuese algo normal. Que la convivencia con otras generaciones y personas de distinta índoles, pues formara parte de un crecimiento personal que al compartirlo, nos haría la vida mucho mas felices. Bueno, compartir un sueño, un mensaje, una luz en el camino... es una forma de apostar por un mundo mas humano, mas humanizado, lleno de posibilidades de luz y esperanza... ¿Te apuntarás?
Realizar este trabajo no es una obligación. Es una opción para que todos y cada uno de nosotros podamos, quizás, alcanzar la felicidad y algo sumamente hermoso como es compartirla con aquellas personas que nos son gratas y queremos.¡Una sonrisa transmitida con el corazón no cuesta dienero, e ilumina multitud de vidas agradecidas!
M.Mercedes Rodríguez Perera 28/04/14
Sabes, en un mundo como el nuestro, donde muchas veces, las ventajas de ciertos artefactos que producen una gran curiosidad, pues puede apagar en el demabulaar del tiempo, la capacidad de sonreír, de compartir, de amar, de solidarización. A veces, quizas tanto avance en tecnología, no controlada, pues puede, quizás, matar la comunicación que puedas tener con tu compañero/a de al lado. ¡Sabes, estamos vivos! Quizás suene una alarma que comente: no se despisten, sigan con los aparatos de última tegnología que os hará felices. Sí, quizás, pueda ocurrir.No estoy en contra de las nuevas tecnologías... mas control en personas que les supera dicha tecnología.
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