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lunes, 16 de junio de 2014

Las puertas


   Una puerta abierta...
       _Pues una ilusión que nunca ha de morir del todo.
       _Un lugar de acogida. Mejor si es entrañable.
      _Un lugar que invita al diálogo, al compartir, a la solidaridad, a la comprensión, al amor.
              _Aquella que me envolvió casi sin dar me cuenta, pues en todo un misterio de inquietantes historias. La realidad es que me costó salir airosa de tal situación, mas la vida espabila y es importante agarrarse a ella. Mas se puede salir airosa de situaciones un tanto difíciles, mas no imposibles de superar sus obstáculos. Por supuesto, no dejer de mirar dicha puerta ni sus obstáculos... Sí, es verdad, marcó lo esencial de todo aquello vivido. Aunque me sobrepuse. Hoy camino con optimismo, con ilusión, con esperanza... con la ilusión de haber le ganado uno de tantos  pulsos a la vida.
          _Una puerta abierta puede ser, también, pues una actitud positiva, de superación, hasta de coraje. Sí, pese a quién pese se suele salir a flote. Sin olvidar, en ningún momento, todas aquellas personas que han estado ahí, en nuestro camino. Muchas veces, sin saber de nuestro recorrido, de las consecuencias en el andar, menos aun se sabe... del final del camino. Mas las buenas compañías se saborean como una exquisitez de plato.

    Una puerta cerrada...
         _Cuando me insultan descaradamente, con intención de hacer daño.
         _Cuando tras ella encontramos una cárcel que, aunque sin red, pues pueda paralizar nuestros movimientos, nuestra comunicación interior-exterior. Incluso nuestro atrevimiento que puede ser muy positivo.
               _Cuando somos nosotros los que fabricamos una puerta super hermética, e intentamos buscar culpables por las cuatro esquinas de toda habitación. A veces, es cuestión de entrar sin mas...
              _Una puerta cerrada puede ser cuando... cierro las puertas de mi libertad, de mis momentos bunos y malos, de mis ganas de tirar hacia delante y me encierro en un cuarto oscuro, sin ningún tipo de luz. Es ahí donde verdaderamente me pierdo a mí mismo y mi vida es un vacío donde ponerse en marcha es toda una urgente necesidad de supervivencia. ¡Quizás una urgente y auténtica aventura!

     M.Mercedes Rodríguez Perera    16/06/14

2 comentarios:

  1. A veces le cerramos la puerta a nuestra libertad, nuestra ilusión, nuestras ganas de vivir, pues por motivos de desengaño, de fracaso, de pérdida de papeles... mas el tiempo te hace descubrir que no era para tanto, que la vida continúa y tenemos mucho por vivir. Quizás a veces, acompañados por un variopinto paisaje que borra de nuestras mentes un sin fin de pausas, de situaciones que debieron haber descansado eternamente hace muchísimo tiempo.

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  2. La puerta hay que abrirla a los bonitos sueños, a los encantados momentos que casi, casi se nos escapan de nuestras manos.Quizás por un despiste. Cuando tras una situación difícil, consigues agarrarte a la vida... no olvides que has de seguir adelante, siguiendo tu rumbo, aprendiendo de la vida y de los que han querido estar junto a ti. La vida puede ser muy bonita... el esfuerzo en el camino nos la hace saborear la mejor. Sobre todo.. cuando somos conscientes del esfuerzo en el sendero atravesado.

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