Aquéllos momentos titubeando en el tiempo. Jugando con las mariposas. Cortejando a las margaritas. Momentos en el campo donde el tiempo parecía detenerse, estar atento a todo lo que circulaba a tu alrededor. Momentos para hablar, sentir, para experimentar situaciones nuevas, momentos diversos... Y la vida me conquista cuando soy feliz. Cuando tengo una buena relación conmigo misma y con el medio exterior.
A veces, te agarras a un sentimiento positivo(sientes la necesidad de hacerlo), con la esperanza de que ilumine tu espacio, tu juego y hasta tus dudas...
Mas afrontar la realidad, tu mundo, las circunstancias mas vitales de todo ser humano, pues en ocasiones cuesta, resultan difíciles de asumir... Mas agarrarse a lo desconocido, solventar problemas, arriesgar por momentos, te puede llevar a un grado grande de maduración personal. Nadie ha dicho que integrarse en el mundo sea cosa fácil. Mas es evidente que, se manifiesta como toda una necesidad. El que no arriesga difícilmente descubre sus momentos importantes. Aquellos que te hacen latir el corazón de entusiasmo, de saber estar, de agradables momentos de luz.
Que te conquiste la vida, que te emocione tu mundo, que te libere la forma de contactar con el mundo interior-exterior. ¡Mas ante todo sé feliz!
Mas el que no arriesga, difícilmente gana partidas importantes.
Y la vida... siempre va a estar ahí.
M.Mercedes Rodríguez Perera
Vivimos en una sociedad tan abrumadora, en ocasiones, con tantas prisas, con tantas preocupaciones y obligaciones... que puede resultar todo un imposible buscar la calma. Encontrarla en algún rinconcito de tu espacio mas particular.Busca momentos para ti, llénalos de tu persona, de tus hobbys, de tu necesidad de expresarte ante el mundo. Sé feliz y transmite, de alguna manera, esa felicidad al mundo. Sé consciente de aquellos momentos que aun siendo dificultosos, pues te llevaron a buen puerto. ¡Disfruta de tu vida, ama la vida, aprende a ser feliz, y comunícalo a manos llenas!
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