¡Oh, estar a oscuras!

   Cuando la vida se te apaga lentamente, casi casi te dejas vencer por tal situación.

       Cuando la droga(no me refiero a medicamentos que puedan tener ciertas sustancias que son necesarias para el organismo)...

   La droga como vicio te puede convertir en un cero a la izquierda.

   En alguién que no tiene nombre.

   En una persona desahuciada fisica y emocionalmente.

   Tal vez buscan en ella una libertad mal entendida y mal encauzada... esa búsqueda te puede llevar a una desorientación brutal. Incluso a perderte en multuitud de ocasiones. ¡Oh, mal rollito!

    Te puedes convertir en marioneta de alquiler.Sí, en reina de un desierto totalmente destronado. ¡Caramba, qué me dices!...

           Tal vez en un estado de sedación provocado, quizás por el abuso de las drogas o estupefacientes no recetados adecuadamnete, puedes llegar a vivir en tus propias carnes el vacío brutal de las ausencias.... mas no compensa por que el tiempo suele pasar facturas de escándalo. Algunas de ellas parece todo un imposible pagarlas. ¡Oh, no me digas...!

          Mas un día despiertas porque sabes que... tu vida merece la pena ser vivida.

         Entiendes que tienes unos derechos que te amparan.

         La rehabilitación te lo debes a ti misma, a la gente que te quiere, a personas ya no presentes que confiaron plenamente en ti.

         Un día te levantas y sabes... que en ese mismo instante empieza tu vida. Una oportunidad que te has ganado, probablemente, a consciencia. A sabiendas que muchas personas han apostado por ti y te debes a su confianza, a su respeto, a su capacidad de aguante, maduración, fortaleza para estar ahí.

       Pues sí, se lo debemos a muchísimas personas que confian plenamente en nosotros. Quizás nuestra experiencia personal les sea válida para su estilo de vida, su necesidad, su aprendizaje.Que en definitiva, es un poco nuestro aprendizaje. Mil gracias por estar ahi.

      M.Mercedes Rodríguez Perera