Sabes, me sentí totalmente desprotegida. Mas una idea algo clarividente me dio un empujón casi sin querer hacia delante. ¡Oh, pero que le pasa a ella!
Allí estaba yo, prácticamente al descubierto. ¡Oh, a ver quien da mas!. Me sentía en un infierno mental y físico brutal! Había intentado salir de allí muchísimas veces... mas me caía en los caminos trayectos de vida. Mas yo que soy la mar de testaruda empecé a ser algo que considero clave, fundamental, primordial en todo ser humano. Buscar ciertas personas que quisieran ayudarme desde un punto de vista humano, cercano, atento... ¡El frío emocional que podía llegar a sentir estaba a muchísimos grados bajo cero!Bueno, había que intentarlo con personas que quisieran estar ahí. Que me conocieran bien, que estuviesen acostumbradas a escuchar a otras personas... y por supuesto, que entendieran de mundos a parte.
No fue ni fácil, ni cómodo, ni divertido... Mas de alguna manera yo debía buscar, seleccionar un equipo que quisiera trabajar conmigo. Basado en el respeto, en una libertad bien entendida, con una gran complicidad personal. Todos juntos, haciendo equipo, quizás pudiera yo tener mucha mas suerte.
¡Oh, milagro!... casi sin ser de todo consciente de ello empecé a salir de un infierto, a familiarizarme con una realidad para la cual, aparentemente, estaba vetada. Sentí que la nebulosa mágica e inmensa que envolvía mi vida pues se rompía en mil pedazos y yo volvía a tocar tierra firme, a tener una actitud cercana conmigo misma, contigo, con el mundo, con la sociedad en general. Mi mundo tocaba tierra. El aterrizaje había sido forzoso, puesto que, mi persona estaba totalmente destrozada. Mi mundo era prácticamente inaccesible por lo que había que intentar de todas todas un nuevo aterrizaje. Mas salió bien. Hoy, por hoy, de alguna manera hay nuevos amaneceres en mi vida. Sí, pero a maneceres reales, vivos, cómodos y hasta felices. Salir de allí fue todo un infierno. Solidarizarme, de alguna manera con muchos de vosotros, pues fue toda una bendición que ni caída del cielo. Por ello yo hoy quiero daros las gracias por ayudarme a salir de todo un abismo.
Por supuesto, dar las gracias también a Salud mental por ayudarme, en gran medida, a salir de tal infierno. Infierno vivido desde la interioridad y sufrimiento de mi propia ser. Sin posibilidad de comunicarlo al exterior puesto que la credibilidad de lo vivido estaba realmente en número rojos (difícilmente creíble) Por que la otra parte afectada pues echaba tierra, arena y cemento cada vez que yo intentaba salir de dicho infiernto. Bueno, ya casi todo ha pasado. Y Salud mental ha sido importantísima en mi recuperación. Una medicación adecuada, concreta a mi necesidad, ha hecho verdaderas maravillas en mi persona. Presumo de una compensación, de una estabilidad que me ha permitido contactar con el mundo real. Sí, con muchos de vosotros. ¡Mil gracias por estar ahí!
M.Mercedes Rodríguez Perera
Yo pienso que salir de un infierno afectivo, emocional y hasta físico no ha de ser nada fácil. Mas salir solos es francamente difícil. Quizás te la hayan jugado amistades de toda la vida. Amistades en las cuales tú te has implicado, positivamente, miles de veces. Mas hay gente muy generosa. A lo mejor hasta mas cerca de lo que tu te piensas. Personas que te pueden ayudar a salir de ese bloqueo mental, de esa no comprensión de los hechos. Mas si sales a la superficie te darás cuenta que la vida merece ser vivida, sentida y hasta experimentada. ¡Ah, y que hay muchas personas de buen corazón que estarían dispuestas a echarte una mano!¡Sonríele a la vida!¡Y la vida, probablemente, te regalará lo mejor de sí misma!¡Suerte!
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