lunes, 9 de febrero de 2015
¡Por una mirada!...
¿Qué harías por una mirada!
Pues me pensaría la forma de llegar hasta ella.
Intentaría canalizar la esencia de su mundo.
Jugaría a las canicas y hasta me dejaría meter un gol en su nombre.
Destilaria su mirada en un firmamente.¡Oh, qué fuerte!...
Preguntaría si tiene dueño.
Por una mirada sería capaz...
De romper mil esquemas y me replantearía la luz de mis andares.
Con su mirada jugaría al escondite y me haría el encontradizo.
¡Pues no me lo creo!
¡Pues mas o menos!
¡Que las cartas no siempre están hechadas del todo!
M.Mercedes Rodríguez Perera
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Una mirada puede ser muy cercana, muy austera, muy despierta, muy agresiva, muy aventurera... hay quizás, miradas que matan.Otras, tal vez, se hagan las encontradizas. La mirada que conquista no suele ser sincera. Te puedes perder en su mundo... y hasta puedes encontrar miradas que rescatan. Unas agradecidas. Otras, un tanto amulientas. En fin, cosas de tanto y tanto mirar infinidad de miradas en todo un firmamento virtual. ¡Pero qué me dices! ¡Pues... cuidado con ciertas miradas!
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